Tuesday, September 17, 2019

CULTO DE LA IGNORANCIA EN LOS ESTADOS UNIDOS


CULTO DE LA IGNORANCIA EN LOS ESTADOS UNIDOS

Nota al lector: Una discusión separada del culto de la ignorancia a nivel global, en los campos político y empresarial, se encuentra pulsando aquí para la primera parte y aqui para la segunda parte.

Índice:

Presentación y resumen
1. Ciencia, inteligencia y mentalidad popular
2. Rechazos: conocimientos especializados y elitismo
3. Prensa libre y comprensión de lectura
4. Resistencia popular a la información seria
5. Elitismo intelectual para todos


Presentación y resumen

En 1980 la revista Newsweek publicó un artículo titulado El culto de la ignorancia de Isaac Asimov (Rusia 1920- EEUU 1992), profesor de la Escuela de Medicina de la Universidad de Boston, divulgador científico y novelista de ciencia ficción.

El escrito se refiere a lo que él percibía como una ausencia de opinión pública educada en los Estados Unidos y gira alrededor de la máxima “mi ignorancia vale lo mismo que tus conocimientos”. El autor enfatiza los siguientes puntos:

1. hay mucha gente que se contenta con tener nociones muy básicas de lectura, escritura y aritmética, pero no quieren cultivarse lo suficiente para entender la información a su alcance,


2. la misma gente considera que la educación avanzada y las muestras de inteligencia son una mancha en el carácter de la persona,

3. hay también mucha gente que desconfía de los expertos,

4. la misma gente que desconfía de la inteligencia y del conocimiento de los expertos exige respeto intelectual y aceptación para sus opiniones ignorantes,

5. hay muchos políticos que alientan estas actitudes entre sus seguidores, se pronuncian contra los intelectuales y expertos y hablan incorrectamente para igualarse con los ignorantes, y

6. este mal, sin embargo, no es irremediable pues toda persona con un cerebro normal puede con diligencia ingresar a la elite intelectual.

Tom Nichols[i] amplía las observaciones de Asimov en un artículo publicado por la revista estadounidense The Daily Beast en mayo del 2017:

 “Hoy hay más personas mejor educadas que en cualquier momento del pasado y es muy fácil acceder al conocimiento. ¿Por qué, entonces, con frecuencia despreciamos a quienes con seguridad saben más que nosotros? […] Vivimos en tiempos de peligro. Nunca ha habido tanta gente con acceso a tanto conocimiento que al mismo tiempo sea tan resistente a aprender. En los Estados Unidos y en otros países desarrollados gente obviamente inteligente denigra de los logros intelectuales y rechaza el concepto de los expertos. Hay un número creciente de personas ignorantes que no solo carecen de conocimientos básicos sino que desprecian las reglas fundamentales de evaluación de evidencias y se niegan a aprender la manera de formular argumentos lógicos. Su comportamiento pone en peligro la conservación de los conocimientos acumulados en el curso de los siglos y debilita los hábitos y prácticas que nos permiten desarrollar conocimientos nuevos.”

Un artículo de Nicols sobre el ocaso de los expertos se encuentra en castellano pulsando aquí.



EL CULTO DE LA IGNORANCIA


Artículo publicado en el semanario estadounidense Newsweek, edición del 21 de enero de 1980.

1. Ciencia, inteligencia y mentalidad popular

Es difícil estar en desacuerdo con la justificación que se usa tradicionalmente para defender la existencia de la prensa libre: “Los Estados Unidos tienen derecho a saber”. Sonaría cruel preguntar con maliciosa intención: “¿El derecho de los Estados Unidos a saber qué, si se puede decir?, ¿ciencias?, ¿matemáticas?, ¿economía?, ¿idiomas?”.

A nada de eso nos referimos, por supuesto. De hecho uno puede asumir que de acuerdo con la preferencia popular los estadounidenses estarían mejor sin esas bobadas.

En los Estados Unidos hay un culto de la ignorancia. Siempre lo ha habido. Una tendencia al anti-intelectualismo se extiende como un hilo siempre presente en la vida cultural y política, sostenido por la creencia equivocada de que en la democracia “mi ignorancia vale lo mismo que tus conocimientos”.

Los políticos se esfuerzan todo el tiempo por hablar el idioma de Shakespeare y Mllton tan incorrectamente como sea posible para que su público no se ofenda creyendo que fueron a la escuela. Así por ejemplo Adlai Stevenson, quien cometió la imprudencia de permitir que su inteligencia, saber e ingenio se manifestaran en sus discursos, terminó viendo cómo el pueblo estadounidense se fue en masa detrás de un candidato presidencial que inventó una versión del idioma inglés que solo él conoce y que desde entonces ha sido el dolor de cabeza de los humoristas[ii].

Uno de los blancos más importantes de George Wallace en sus discursos es el “profesor intelectualoide”. Y hay que oír las carcajadas de aprobación de su público de “intelectualoides” cuando oye esa expresión[iii].

2. Rechazos: conocimientos especializados y elitismo

Tenemos también un eslogan nuevo por parte de los obscurantistas: “No hay que confiar en los expertos”.

Hace treinta años era: “No hay que confiar en los mayores de 30 años”. Pero los que coreaban este eslogan se dieron cuenta de que la alquimia inevitable del calendario tarde o temprano los ponía en el grupo de no confiables. Así que, al parecer, decidieron no volver a cometer ese error. En cambio, “no hay que confiar en los expertos” es algo que va sobre seguro. Nada, ni el paso del tiempo ni la exposición a información los convertirá en expertos en cualquier tema que sea medianamente útil.

Tenemos también un cliché nuevo para referirnos a alguien que admire el conocimiento, el saber, la idoneidad y la destreza y aspire a propagarlos. A personas así las llaman “elitistas”.

Este es el cliché más gracioso que se haya podido inventar. La gente que no pertenece a la élite intelectual no sabe qué es un “elitista”, ni siquiera sabe cómo pronunciar la palabra. Por eso cuando alguien grita “elitista” es obvio que él o ella es un elitista clandestino que se siente culpable de haber ido a la escuela.

3. Prensa libre y comprensión de lectura

Olvidemos entonces mi maliciosa pregunta inicial. El derecho de los Estados Unidos a saber no incluye el conocimiento de temas elitistas. El derecho de los estadounidenses a saber se refiere a algo que podemos describir vagamente como “lo que pasa”. Los Estados Unidos tienen derecho a saber “lo que pasa” en los tribunales, en la Casa Blanca, en las asociaciones industriales, en las agencias de regulación y control, en los sindicatos obreros, en general, en las sedes del poder.

Eso está bien. Yo lo acepto. Pero, ¿cómo se logra que la gente sepa todo eso?

La respuesta llega casi gritada: que se nos garantice una prensa libre y un equipo de reporteros investigativos independientes y valerosos y con ellos podemos confiar en que la gente sabrá.

Sí. A condición de que la gente pueda leer.

La realidad es que leer es uno de esos tópicos elitistas de los que vengo hablando y el público estadounidense, por lo general, dados su desdén por los profesores “intelectualoides” y su desconfianza en los expertos, no está en capacidad de leer y no lee.

Seguro que el estadounidense promedio puede firmar su nombre de manera más o menos legible y puede entender los titulares deportivos, pero, me pregunto, ¿cuántos estadounidenses no elitistas pueden leer, sin mucha dificultad, mil palabras consecutivas en tipo pequeño, algunas de las cuales pueden ser trisílabas?

Más aún, la situación se está agravando. Los resultados de los exámenes de lectura en las escuelas van en caída sostenida. La señalización en las carreteras, que ya era un ejercicio de mala lectura (N. del T.: El autor se refiere al uso de expresiones incompletas para dirigir el tráfico y da como ejemplos "Go Slo", "Xroad"), está siendo reemplazada por pequeños dibujos que pueden ser entendidos por viajeros extranjeros y, de paso, ayudan a los que saben cómo conducir un vehículo pero que no pueden leer porque no son “profesores intelectualoides”.

También en los comerciales de televisión se ven con frecuencia mensajes escritos. Si uno los analiza se da cuenta de que en las agencias de propaganda nadie cree que los vaya a leer alguien diferente al elitista ocasional. Para asegurarse de que no solo esta minoría selecta recibe el mensaje, el locutor lee cada palabra en voz alta.

4. Resistencia popular a la información seria

Si ese es el caso, entonces ¿cómo consiguieron los estadounidenses el derecho a saber?

Reconozcamos que algunas publicaciones hacen un esfuerzo honesto para decir al público lo que debe saber y al mismo tiempo preguntémonos cuántas personas efectivamente las leen.

Existen aproximadamente doscientos millones de estadounidenses que han pasado parte de su vida en un aula escolar y que aceptarán que saben leer (con la condición de que uno no divulgue sus nombres ni los haga avergonzar ante sus vecinos), pero los periódicos más reconocidos consideran que les va muy bien si tienen una circulación de medio millón de copias. Se puede decir que solo un uno por ciento –o menos- de los estadounidenses intenta ejercer su derecho a saber. Y si tratan de hacer algo con base en lo que aprenden lo más probable es que sean acusados de elitistas.

Yo sostengo que el eslogan “el derecho de los Estados Unidos a saber” es una expresión vacía cuando tenemos una población ignorante y que la misión de la prensa libre es efectivamente nula cuando casi nadie la lee.

¿Qué podemos hacer para remediar la situación?  

Podemos empezar por preguntarnos, ¿es la ignorancia algo que al fin y al cabo resulta maravilloso?, ¿es válido, entonces, denunciar el “elitismo”?

5. Elitismo intelectual para todos

Yo estoy convencido de que todo ser humano con un cerebro físicamente normal puede aprender mucho y puede ser intelectual. En mi opinión lo que necesitamos urgentemente es aprobación y reconocimiento social del saber.

Todos podemos ser miembros de la elite intelectual. Será entonces, y solamente entonces, cuando tendrá sentido una expresión como “el derecho de los Estados Unidos a saber”, y lo tendrá también un verdadero concepto de democracia.


Traducción y subtítulos de Luis Mejía
10 de septiembre del 2019
Publicado en blogluismejia.blogspot.com




[i] Profesor de la Escuela Naval de Guerra de los Estados Unidos y autor del libro El ocaso de los expertos
[ii] Asimov se refiere a las camapañas presidenciales estadounidenses de 1952 y 1956 cuando Stevenson, nominado por el Partido Demócrata, fue derrotado por Ike Eisenhower, candidato del Partido Republicano.
[iii] Wallace, del Partido Demócrata, fue gobernador del estado de Alabama por cuatro períodos entre 1963 y 1987. Fue famoso por su respaldo radical a la segregación racial y su populismo de derecha. En 1979 renunció su racismo previo, pidió perdón a los negros por sus acciones y en su último período como gobernador nombró a muchos de ellos en posiciones oficiales.

8 comments:

  1. Paren de parir - Gobierno debe hacer de control de natalidad en venezolanos una prioridad de su estrategia migratoria - Por: Claudia Palacios

    Este es un extraordinario ejemplo de ignorancia crasa sobre sexualidad, reproducción y migración, convalidado por un sector de ls elites colombianas al ser publicado por el diario de mayor circulación en el país.

    https://www.eltiempo.com/opinion/columnistas/claudia-palacios/paren-de-parir-columna-de-claudia-isabel-palacios-giraldo-374742

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  2. The Dumbing Of America By Susan Jacoby

    http://www.washingtonpost.com/wp-dyn/content/article/2008/02/15/AR2008021502901.html

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  3. Anti-Intellectualism in American Life by Richard Hofstadter

    A review by O. Alan Weltzien

    https://mtprof.msun.edu/Spr2008/weltzrev.html

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  4. ANTI-INTELECTUALISMO EN LA VIDA NORTEAMERICANA
    HOFSTADTER, RICHARD
    EDITORIAL
    Editorial Tecnos

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  5. Who doesn’t read books in America?
    Pew Research Center

    https://www.pewresearch.org/fact-tank/2019/09/26/who-doesnt-read-books-in-america/

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  6. Comparar a un presidente con sus predecesores o sucesores implica conocimiento o ignorancia de historia, ciencia poítica y moral social. Desde ese punto de vista la siguiente encuesta ejemplifica el culto de la ignorancia:

    A Majority of Republicans Say Trump is Better President Than Lincoln

    https://slate.com/news-and-politics/2019/11/majority-republicans-trump-better-president-lincoln-poll.html

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  7. How America Lost Its Mind - The nation’s current post-truth moment is the ultimate expression of mind-sets that have made America, by Kurt Andersen

    https://www.theatlantic.com/magazine/archive/2017/09/how-america-lost-its-mind/534231/

    Note: This article presents an excellent compilation of facts and quotes. They are all verifiable. The explanatory hypotheses, though, can be viewed with a little grain of salt.

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  8. Great example of ignorance as a cult with missionaries and followers

    A Louisiana pastor who defied coronavirus orders is asking people to give their stimulus money to the church, By Eric Levenson, CNN

    https://www.cnn.com/2020/04/19/us/louisiana-pastor-coronavirus-stimulus-checks-trnd/index.html

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