INTERPRETANDO LA VOZ DE DIOS
Presentación:
Woody Allen, literato, director de cine, actor, libretista, músico, humorista y ‘celebrity’ estadounidense ha escrito una versión alternativa del sacrificio de Isaac.
Su narración tiene varias interpretaciones. A primera vista se puede leer como una parodia irrespetuosa de las escrituras judeo-cristianas. Pero hay otras maneras de leerla.
En lenguaje liviano -y con pensamiento profundo- Allen, a mi parecer, pone un reflector sobre la irracionalidad y la falta de claridad moral de quienes siguen a figuras carismáticas o creen en charlatanes muy seguros de sí mismos.
La voz de Sara en el relato de Allen es un llamado al buen juicio y al sentido común: ¿qué bases tiene uno para creer lo que le dice alguien? Ella expresa su objeción en el lenguaje que entiende su marido. Lo conoce.
La voz de Isaac expresa otra dimensión del sentido común. ¿Qué quieren lograr los que le dicen a uno que haga algo irracional o inmoral?
La excusa de Abraham refleja las inconsistencias de alguien que toma decisiones y actúa sin pensar o que obedece sin darse un momento para ver las implicaciones y las consecuencias de las órdenes que recibe.
En últimas, el texto de Allen es una invitación a la racionalidad, de la que hemos hablado en este blog [Pulsa aquí].
…Y Abraham despertó en medio de la noche y dijo a su único hijo Isaac: “He tenido un sueño en el que la voz del Señor me dijo que debía sacrificar a mi único hijo. Así que ponte los pantalones”.
E Isaac tembló y dijo: “¿Hablas en serio? ¿Cuándo habló Él de eso?”
“¿Qué iba a decir yo?”, replicó Abraham. “Son las dos de la mañana, estoy en ropa interior, y me doy cuenta de que estoy con el Creador del Universo. ¿Me voy a poner a discutir?”
“¿Cómo sabes que fue el Señor y no alguien como ese amigo tuyo que adora las bromas pesadas? El Señor las aborrece y ha ordenado que quien las haga sea entregado a sus enemigos aunque estos no quieran pagar el flete de entrega”.
Pero Abraham le contestó: “Porque yo sé que fue el Señor. Era una voz sonora, bien modulada, nadie en el desierto puede hacerla resonar como él”.
Y Sara dijo: “¿Y tú estás dispuesto a hacer una insensatez de ese tamaño?”
Y Abraham le contestó: “Hablando con toda franqueza sí, porque poner en duda la palabra del Señor es una de las peores cosas que puede hacer una persona, especialmente como está la economía en este momento.”
Y Abraham llevó a Isaac a un cierto lugar y allí se preparó para sacrificarlo. Pero al último momento el Señor le detuvo el brazo y le dijo: “¿Cómo te atreves a hacer esto?” Y Abraham dijo: “Pero tú me dijiste…”
“Lo que dije no tiene importancia”, dijo el Señor. “¿Acaso tomas en serio cualquier tontería que te pase por el camino?” Y Abraham se sintió muy avergonzado.”Oooh… no, realmente…”
“Yo sugiero de broma que sacrifiques a Isaac y tú inmediatamente pegas carrera a hacerlo”.
Y Abraham cayó de rodillas y dijo: “Perdona, pero yo nunca sé cuándo estás bromeando”.
Y el Señor tronó: “Ningún sentido del humor. No puedo creerlo”.
“Yo estaba dispuesto a entregarte mi hijo en obediencia a tu capricho. ¿No prueba esto mi amor por ti?”, dijo Abraham.
Y el Señor dijo: “Lo que prueba eso es que algunos hombres están dispuestos a seguir cualquier orden, no importa lo estúpida que sea, si les llega de una voz sonora y bien modulada”.
Y diciendo esto el Señor le dijo que se fuera a casa a descansar y que se presentara ante Él al día siguiente.
Originalmente publicado en: Woody Allen, The Scrolls, The New Republic, August 31, 1974. Available at: https://newrepublic.com/article/113899/scrolls-woody-allen (Accessed: 15 September 2020).
12 de octubre del 2020
Publicado en blogluismejia.blogspot.com
Apabuyantes: 1- el justo análisis de las voces en la parodia que haces y 2 - la estupidez humana que pone en evidencia el comportamiento de Abraham
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